Conoce acerca de la Gastritis: El mal de la juventud

En una vida tan agitada como la tienen los universitarios se nos exige, con las idas y venidas, el trabajo, la familia y el estrés, dejamos de lado una buena alimentación y muchas veces comemos rápido y mal, con las consecuencias negativas que esto acarrea para nuestra salud. Un reflejo de ello es que se presenta algún tipo de dolencia estomacal, como la gastritis, que van unidas al estilo de vida y que repercuten notablemente tanto en nuestro bienestar físico como mental. Por ello, es muy importante mantener una dieta equilibrada. Concretamente, la gastritis es una inflamación de la mucosa del estómago, una enfermedad muy frecuente que en la mayoría de los casos se manifiesta tras una comida muy copiosa o inusualmente fuerte, o por la ingesta de alimentos en mal estado, que pueden producirnos una infección. Los síntomas de la gastritis, se caracteriza por una pesadez de estómago, pérdida del apetito, acidez, ardor en la boca del estómago o gases, nauseas, vómitos y en cuanto a las causas de la gastritis, normalmente el estómago y el duodeno son resistentes a la irritación por los potentes ácidos producidos en el estómago. Pero existe una bacteria Helicobacter pylori que puede debilitar el revestimiento mucoso protector del estómago y del duodeno, permitiendo que el ácido pase al revestimiento sensible que se encuentra debajo. Esta bacteria habita la cubierta mucosa del estómago y casi 8 de cada 10 personas, tienen esta bacteria que se adquieren por la alimentación. Lo mismo puede pasar por el uso excesivo de alcohol, vómitos crónicos, estrés o el uso de ciertas medicinas como lo es la aspirina y otras drogas anti-inflamatorias. Otras causas son las siguientes; Anemia perniciosa, reflujo biliar, infecciones causadas por bacterias y virus, desórdenes autoinmunes o ayunos prolongados. Efectivamente, lo mejor es adecuar nuestra alimentación para hacerla más saludable. Aunque hay personas más sensibles que otras, es esencial mantener una dieta equilibrada, es decir, una nutrición básica ha de ser lo más variada posible en sus ingredientes y debemos intentar distribuir su ingesta a lo largo del día, a ser posible en cuatro o cinco comidas.