Policía se declara en alerta roja en Andahuasi
Registros Públicos reconoce al directorio del grupo Bustamante, que tomó en mayo la azucarera. Grupo Wong insiste en que debe respetarse el fallo judicial que dispone el desalojo inmediato
La tensión continúa creciendo en el valle limeño de Sayán ante un posible desalojo de los ocupantes y administradores que se encuentran en las instalaciones de la disputada empresa Agraria Azucarera Andahuasi. Los cinco mil habitantes que residen en el pueblo homónimo serían los más vulnerables a la intervención de las fuerzas del orden que se encuentran en alerta roja.
Las bombas lacrimógenas y el paso de unos mil policías por las estrechas calles del poblado de Andahuasi afectarían principalmente a los niños, ancianos y mujeres, quienes no tendrían dónde trasladarse ante una resistencia de los trabajadores y socios.
Los ocupantes de la fábrica azucarera están organizados para no permitir el ingreso de la policía tanto en las calles del poblado así como en las barricadas instaladas en las zonas aledañas, que abarcan desde el puente de acceso a la carretera Huaura-Sayán hasta el otrora fundo Cañero.
INFIERNO GRANDE
El pueblo de Andahuasi está ubicado frente a las cuatro inmensas puertas de ingreso a la fábrica. Este lugar cuenta con construcciones de material noble, en su mayoría de un solo piso y está formado por veinte manzanas que se vinculan mediante pasajes peatonales angostos.
Es por estos pasajes por donde necesariamente tendría que pasar la policía para proceder al desalojo desde dos puntos. El primero se encontraría en el mencionado puente de ingreso. El otro en la carretera de Río Seco, al que se llega directamente por el desvío de la Panamericana Norte.
Entre el poblado y la fábrica Andahuasi existe una pista de tránsito de los camiones y tráileres de transporte de la caña. Al final de esta vía se encuentra la planta azucarera, en una quebrada rodeada por cerros, totalmente cercada y con mallas de alambre. No hay otro lugar de acceso hacia esta antigua hacienda, considerada la más importante del valle de Sayán.
MOLESTIA POLICIAL
Otra actitud de frustración es la que presentan los policías que se encuentran acantonados entre Andahuasi y la ciudad de Sayán, desde hace más de diez días. La precaria alimentación que tienen al contar con solo S/.6,20 diarios es lo que más les molesta.
Además de la comisaría de Sayán, los policías se han instalado en tres lugares de la ciudad, donde pernoctan en bolsas de dormir sobre cartones y plásticos extendidos en el suelo. La mayoría de ellos lo hace en un local denominado “Salonazo”, usado para fiestas los fines de semana. En el día, mientras unos rondan, otros duermen debajo de los vehículos policiales y a la intemperie.
Muchos dicen haber perdido los trabajos extras que conseguían en sus descansos como seguridad en bancos, empresas y demás instituciones en Lima.
ÚLTIMA RESOLUCIÓN
El abogado de la empresa, Germán Lariu, aseguró que la Sunarp emitió un registro de reconocimiento del directorio de Andahuasi presidido por Eduardo Núñez Cámara y que favorece al grupo Bustamante. Este fue remitido al juez Francisco Bolaños del juzgado transitorio de Huacho. Núñez llegó a la ciudad exhibiendo el documento. “Ahora (la directiva) es legítima y no puede haber ningún desalojo”, señaló.
Al respecto, el presidente de Corporación E.W., Efraín Wong, señaló que esa información no debe interrumpir el proceso de desalojo que debe llevar a cabo la policía. “Hay una orden que tiene que cumplirse contra quienes por la fuerza tomaron el control de la empresa”, afirmó. Para Wong, el tema del directorio es un asunto administrativo separado de lo legal de la propiedad.
PARA RECORDAR
En mayo, ante la compra de capital azucarero por parte del grupo Wong, algunos socios -vinculados al grupo Bustamante- tomaron la azucarera y nombraron como gerente a Greco Quiroz. En junio se recuperó la azucarera y el grupo Wong nombró a Carlos Luna como nuevo gerente.
Los trabajadores plantearon ser parte de la administración de la empresa, pero la propuesta de una gestión tripartita fue rechazada.
En setiembre, un obrero de Andahuasi murió en una protesta. La Conasev sancionó a ambos grupos por infringir las normas y no haber convocado a una oferta pública de adquisición al obtener sus acciones.
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